En 2005 escribía este artículo y ahora le agrego tres párrafos para ver como estamos a partir de aquel diagnóstico y siempre pensando en como seguir, saliendo de los síntomas y atacando a las causas.
No nos resignemos a ser solo reactivos a los síntomas. Vayamos por propuestas, por las causas y por los valores
La agenda oculta: el problema más grave no esta en el gobierno. Cualquier idea innovadora, creativa y transformadora -desde la comunidad- no puede acceder o tener andamiento en los medios masivos. Los políticos continúan hablando de producción, competitividad y crecimiento económico, como la única fórmula de la felicidad. Empresarios, economistas y periodistas acompañan esta muletilla falaz.